Pero a veces me gustaría hacer menos...
Es verdad... a veces me gustaría ser más sencilla y rutinaria. Hacer sólo una cosa y nada más... poder pasar horas frente a la tele sin sentir culpa. Hace unos veinte años fantaseaba con internarme en algún lugar en donde siempre supiera que hacer a cada momento. Dónde lo que debía hacer y cuándo debia hacerlo me lo dijeran desde afuera. Donde yo no tendría que pensar ni decidir nada...
Es común que me pase eso... pero también es re común que recuerde las palabras de la psicóloga que tuve alguna vez "¡VOS ESTAS LOCA! ¿TE IMAGINÁS A UN CULO INQUIETO COMO VOS ADENTRO DE UNA INSTITUCIÓN ASÍ?" Y no, la verdad que no me lo imagino.... pero debo confesar que a veces lo deseo ... porque me siento como una extraterrestre abandonada en un planeta que no reconoce; con reglas que tampoco sabe cuáles son.
Como escribí hace tiempo ... sigo con la sensación de que todo el mundo sabe algo que yo desconozco y que eso que desconozco es la llave para que pueda vivir bien.
No termino de escribir esto y me siento culpable.... Acaso no trabajo de lo que amo y cobro bien por ello... acaso no me permito bailar, viajar y disfrutar... acaso no me miman mis alumnos y amigos... acaso no estoy sana (más allá de los kilitos de más).... Acaso no hay tantas cosas por las que debo agradecer...
Sin embargo me siento en falta y quizás por ello hago tanto. Quizás por eso no me dejo tiempo libre ... porque si pienso me anulo; por que si siento... lloro. Hay cosas que pesan más en la vida que muchas cosas... En mi caso la pareja es una de ellas.
Soy feliz con todo lo que hago pero no soy la excepción de nadie. La soledad mata, o lastima ... que a veces es lo mismo.
Maloserá, gente. Maloserá!