Llevo tiempo escuchando, reclamos de justicia, alegatos, pericias y estrategias. ¿Qué estamos haciendo como sociedad para que nuestro futuro sea la víctima de nuestro presente?
Miro cómo se superponen las noticias y cómo parecen dar lo mismo los 3 meses del mundial, los aniversarios de los asesinatos de Nisman y Fernando Baez Sosa o el juicio a una madre que mató a su hijo de 4 años a los golpes ¿estamos tan insensibles? ¿Nos da todo lo mismo?
La angustia que me invade es enorme. Pienso en las vidas truncadas, los procesos no acompañados. En el da lo mismo, el mirar para otro lado...
Entiéndase bien: acá las únicas víctimas son Fernando, Lucio y aquellos que los amaron en vida. Pero no puedo dejar de pensar ¿qué hubiera pasado si ...
... si en el colegio de Lucio se hubieran dado cuenta de que "algo" pasaba en casa?
... si los vecinos de Lucio hubieran intervenido cuando escuchaban gritos?
... si a los asesinos de Fernando alguien les hubiera enseñado que es de cobarde pegarle a alguien que está en el piso? O que es cobardía ocho contra uno?
... si a los asesinos de Fernando les hubieran enseñado que pelearse porque sí no es signo de hombría... si no de estupidez?
Todas estas suposiciones ya quedan solo en palabras porque los hechos son tan aplastantes que las anulan; las vuelven meras elucubraciones sin sentido.
Pero pienso también en otros "¿qué pasaría si... " que tienen más que ver con lo que sí podemos hacer ahora.
Si en lugar de salir a buscar minutos en pantalla buscamos cómo ser más amables y menos violentos con el que está al lado.
Si los medios en lugar de repetir una y mil veces los videos de la golpiza, hablaran de los sueños que se vieron truncados. De las ganas de misionar de Fernando, de largar un poco el celu. Lucio era más chiquito pero seguro sus ganas de reír, de jugar y de cantar...
Si el trending tópic además de justicia hablara de paz, de amor y de vida.
Soy salesiana, no puedo escapar de lo que soy... y no dejo de pensar en el sistema preventivo del que hablaba Don Bosco. Si como sociedad priorizamos la escucha atenta, la alegría de la compañía y la contención... seguramente habrá menos "Fernandos y Lucios"
Maloserá, gente. Maloserá!