Elegìa

 No entiendo la muerte.Se supone que la gente no desaparece, no se evapora ... pero así sucedió. ¿Cuántos planes quedaron frenados? ¿Cuántas ideas, proyectos o deseos? ¿Qué hacemos los que nos quedamos... con lo que nos quedamos? archivar documentos y guardar ropa... donar ropa y sacar rastros no es sólo pare de seguir viviendo... es parte de no morir con el que se fue.

Tengo miedo. La muerte se acerca cada vez más inesquivable... El Barba ... mi alumno, y ahora este amigo cercano... Lógicamente, no son muertes desgarradoras puedo manejarlas ... pero así todo duelen. Y me imagino el dolor de muertes más cercanas y me paralizo. No puedo seguir pensando... no soy capaz... Pienso en vivir y dar para diante... ¿no avóa? Xamais te coñecín a túa morte foi moito tempo antes da miña vida... e aínda sei que estaches ahí. Falo convosco...  e imaxino a túa presencia e termos... aínda os primos galegos dixéronme que tí no eras coma imaxineite. Non sei. A morte do meu avó non foi dura... era espectros da miña vida que xamaís tiveron forza. a Tía Conce aco que era pequenina e non lembro moito... 

Pero ahora la muerte de este amigo arde en el pecho y molesta. se acerca como recordatorio deque debería tener algo en cuenta y no lo tengo. Calabres, vos sabés que hiciste todo mal... vos sabés que mi enojo está más que justificado... y sé que no te jode que te putee y te recuerde enojada pero sin culpa. Igual me dolés. No puedo creer que no vamos a hablar más. No puedo creer que ya no existís... o que estás en un plano al que no llego ni voy a llegar. Una de las cosas que me enseñaste es que la culpa es un escudo de comodidad y soberbia... de cagones que no quieren cambiar... y eso no me gusta de mi y por suerte me dice la libetad de recordarte así... sin culpa... aunque los últimos 20 días te puteé como nunca... ¿Será eso la muerte? Lo que queda del otro en nosotros cuando el otro se va? Me parece poco... me parece demasiado efímero. 

Calabres... tengo que sostener a la Tana... a la llamita y a pioji. No paro de pensar que ninguno de los dos va a conocerte... No sé si es bueno o malo... la idealización o la verdad cruda... Creo que preferirías la verdad... pero ahora no hay cómo comprobarlo... Solo queda el silencio.

El contexto es difícil y la cabeza se pierde por lugares que uno no espera... ¿podés creer que me preocupa quién me va a ayudar con mis cuestiones tecnológicas? ¿Puedo ser tan forra? Seguramente me vas a decir que estoy eludiendo el duelo... Te hacías el boludo... pero siempre fuiste inteligente... o quizás no y eras boludo en serio... No sé... Ahora sólo queda el manto de la muerte sobre lo dicho, hecho, oído, entendido y supuesto. 

Maloserá, Calabres del orto! Maloserá!