El silencio que cura

A veces estar ausente sirve. Eso me dicen y me repiten. Que no esté disponible; que no salga siempre corriendo a solucionarle la vida a todo el mundo. Pero no me siento así. Creo que abandono a todo el mundo y luego todo el mundo me abandona a mí. Por otro lado dicen que se me pasa la hora, que ya no voy a formar familia. Que me voy a quedar sin nadie a mi lado. Es imposible equilibrar ambas posiciones. Y yo en el medio, como un elástico perdido.

Deseado alimenta mi silencio. Ese que tengo tanto que aprender a mantener. Quizás así encuentre la manera de lograr el bendito punto medio. 

Esperaré en silencio.... que alguien lo rompa.

Maloserá, gente. Maloserá!